¿Puedo realizar preguntas cuándo voy a una entrevista de trabajo?

 Esta es una de las preguntas que más a menudo me realizan los alumnos cuando los enviamos a entrevistas de prácticas. Normalmente, los perfiles con años de experiencia ya saben que claro que deben de realizar preguntas.
Pero hay preguntas y preguntas. Si crees que lo primero que debes de preguntar es cuál es el sueldo, el horario o cuántos días de vacaciones vas a tener ¡estás equivocado! Si éstas son las preguntas que tienes en la cabeza, olvídalas porque vas a crear una imagen nefasta tuya, aunque tu currículum sea buenísimo. Este tipo de información te la van a facilitar ellos.
Sin embargo, a los reclutadores de talentos, hay otra serie de preguntas que les gustan mucho y que tienen que ver más con la empresa y el modo en el que puedes aportar beneficios.

Voy a comentarte algunas preguntas que puedes realizar y que pueden nivelar la balanza hacia tu lado, aunque tu currículum no sea el mejor de todos. Eso sí, espera a que sea el entrevistador quién te de paso a realizarlas. Lo normal es que cuando el reclutador ya haya obtenido toda la información más objetiva y pueda parecer que ha finalizado la entrevista te pregunte “¿tienes alguna duda?, ¿hay algo que quieras saber?”. Este es un buen momento para comenzar a averiguar algunos datos de interés. 

¿Qué se espera de mí?
Los entrevistadores percibirán que eres una persona que busca compromiso, que quiere saber cuáles van a ser sus objetivos. 

Si soy el elegido, ¿En qué proyecto comenzaría?
Verán a un candidato con ganas de incorporarse enseguida. 

¿Cuáles son los factores más importantes para evaluar mi desempeño?
El entrevistador verá a una persona comprometida con el cargo y las labores que tiene que realizar. 

¿Hay oportunidades de formación?
Hoy en día la formación continua es fundamental en casi todos los sectores. Muchas empresas dan formación internamente, pero en otras es el propio empleado quién debe buscar la formación que más se adecúe a su perfil. Con esta pregunta el entrevistador verá a una persona con ganas de avanzar en su trabajo y de aportar conocimientos nuevos. 

Seguro que estás hart@ de oír que hay cientos de candidatos para un puesto de trabajo, pero no siempre los que triunfan son los que llevan el mejor perfil profesional o educativo. Muchas veces, componentes más subjetivos, como la implicación que demuestre el candidato hacia la empresa, el entusiasmo por incorporarse, las ideas para hacerla crecer, etc. juegan un papel tanto o más importante que el expediente educativo o la trayectoria profesional.