- Analiza la situación de partida y define tus objetivos.
El primer paso a la hora de idear una estrategia para redes sociales es el de realizar un exhaustivo análisis de la situación. Para ello, comienza por un análisis interno que te permita tener claro el modelo de negocios de tu marca, de tu cliente.
De esta manera darás con la principal baza, la que será tu diferenciación. A continuación, realiza un análisis externo apoyado en un benchmarck que te permita saber qué está haciendo la competencia, y qué funciona mejor en tu sector. Una vez tengas las conclusiones de ambos análisis, recógelas en una matriz DAFO que te dará una idea del escenario en el que te estarás moviendo. Te permitirá además identificar tus ventajas y tus desventajas, saber a qué amenazas deberás hacer frente y qué oportunidades podrás aprovechar. Cuando el mapa de situación esté claro, será el momento de fijarte unos objetivos específicos, medibles, realistas y acotados en el tiempo, sobre los que se edificará tu estrategia.
- Selecciona tu público objetivo y los medios. Responde esta pregunta: ¿a quién debo dirigirme?
Lo más importante a la hora de comenzar a diseñar tu estrategia en redes sociales, una vez que hayas realizado un análisis de la situación y establecido unos objetivos, es el saber a quién vas a dirigirte.
Dependiendo de a qué segmentos selecciones como tú 'público objetivo', tu forma de relacionarte con ellos y el contenido que les ofrezcas variará. El siguiente punto es detectar en qué redes sociales tiene mayor presencia tu target. Cada red tiene una personalidad propia y aglutina a personas de características concretas (salvo Facebook, que resulta la red más heterogénea en cuanto a usuarios), por lo que es imprescindible estar donde esté tu público. Y finalmente, existen otros canales de difusión que pueden ser el complemento perfecto a la estrategia de difusión de contenidos. De todos ellos, destacar el auge y las ventajas de tener un blog corporativo albergado en la página web de tu marca, sea personal o corporativa. Un blog te ayudará a posicionarte en buscadores de forma orgánica y a presentarte como prescriptores o líderes de opinión ante tus consumidores.
- Creación de la identidad digital
Poco a poco hemos llegado hasta la mitad de nuestra estrategia. Ya tenemos el análisis, los objetivos, el público al que dirigiremos nuestra comunicación y los medios en los que estaremos presentes. En este último apartado hemos conseguido también entender cómo construir nuestro mensaje, que tono utilizar para que todo el mundo lo entienda y lo interiorice, y en qué elementos visuales podemos apoyarnos para reforzarlo. El sentido común tendrá siempre la llave correcta para abrirnos la siguiente puerta, pero también existen herramientas que te ayudarán a comprender por qué tomar unas decisiones y no otras. En este caso, sabiendo la importancia que tiene el ponernos en el lugar del consumidor, te recomendamos hacer
un mapa de empatía que te permita personalizar la comunicación y saber más sobre el tipo de mensaje al que será receptivo tu público.
Para ello cumple los siguientes pasos en cada mensaje:
1. Ponte en el lugar de tu audiencia
2. Sintentiza tu historia y tus valores: quién soy y qué hago y por qué lo hago.
3. Aprovecha los espacios que te prestan las redes para difundir tu mensaje.
4. Elige el mejor formato.
5. Deja espacio para recibir feedback. Ese ejercicio de empatía nos servirá también para elegir nuestro tono y el carácter que queremos imprimir a nuestra comunicación.
Elabora contenidos con elementos visuales, te ayudarán a reforzar tu contenido, haciéndolo mucho más potente de cara a destacar entre todo lo que diariamente se publica en redes sociales. Unos elementos visuales corporativos ayudarán al posicionamiento y mejorarán a apariencia de los canales sociales.
- Creación de contenidos eficaces para el logro de tus objetivos
La principal apuesta en redes sociales debe ser el contenido propio, ya que es el contenido sobre el que tenemos control, el que irá alineado con tu estrategia y será principal recurso para conversar con tu público y fidelizarle a tu marca.
Para generarlo debes basarte en los planes, generales o específicos, de comunicación que tenga la marca, así como en el día a día de la actividad: ofertas, acciones de responsabilidad social corporativa (RSC), eventos, lanzamientos, comparativas, etc.
Para tratar de tener unas redes lo más dinámicas posibles y no saturar a tus seguidores, de vez en cuando puedes reforzar tu comunicación con mensajes de terceros. Esto ayudará a llegar a más a gente (puesto que si lo hacemos de la manera correcta es probable que lleguemos a nuestros seguidores y a los de la cuenta desde la que compartamos), también permite crear sinergias con otras marcas que se dirijan a tu mismo target (excluyendo por supuesto a los competidores) o que complementen nuestro producto y, por último, te ayudarán a posicionarte en el territorio de comunicación que hayas elegido.
No pierdas de vista la actualidad y las tendencias que cada día imperan en las redes. Un buen CM ha de estar al tanto de todas las modas, de los contenidos virales, de la actualidad... Sé rápido a la hora de sumarte a las conversaciones más populares y participa en ellas con un contenido que sume valor.
Repasa cada día los hashtags que llegan a ser trending topic (TT) y tener una rápida capacidad de respuesta a los temas de actualidad utilizando el Real Time Marketing (RTM), son acciones de rutina que te permitirán destacar.
- Medición, evaluación y reajuste
El último paso dentro de la estrategia ha de ser siempre evaluar los resultados, solo así estarás a tiempo de reajustar la estrategia para que sea lo más efectiva posible en la consecución de los objetivos fijados.
Medimos lo que hemos conseguido, evaluamos si estamos en el camino correcto y reajustamos lo que sea necesario.
Un informe semanal te ayudará a detectar qué contenidos funcionan mejor y cuáles son los que registran menor interacción por parte de tus seguidores.
Además, resulta muy importante mostrarse trasparente con tus clientes, por lo que enviarles información periódica de los resultados obtenidos en la gestión de las redes, te ayudarán a mantener una imagen profesional adecuada.