¿Por qué se producen los silencios?
En todas las conversaciones se producen silencios, es uno de los elementos conversacionales.
- Silencio conversacional. Actos que se deben a las reglas de alternancia de turnos.
Hay numerosos estudios sobre los tipos de silencios en las conversaciones. Para Sacks, según su valor distribucional se establecen tres tipos:
- Pausa: se produce dentro de la intervención
- Intervalo: se produce entre turnos
- Lapso: se produce entre secuencias
Camargo Fernández y Méndez Guerrero consideran que hay cinco funciones estructuradoras diferentes:
- Silencios por distribución de turno. Se utiliza para ceder la palabra. Indican al oyente que el turno de su interlocutor ha terminado y puede iniciar el suyo. En ocasiones, la señal de cesión de turno no es interpretada por el interlocutor.
- Silencios por marcación de respuesta despreferida. Se refieren a las ausencias de habla en los pares de adyacencia (enunciados pareados: saludo-saludo, pregunta-respuesta, oferta-aceptación…).
- Silencios por error de coordinación. Los participantes de la conversación no se ponen de acuerdo en el inicio de sus intervenciones, por lo que se interrumpen, se solapan las declaraciones y, en ocasiones, también se producen los silencios.
- Silencios por cambio de tema (o dinamizador de la conversación). Las ausencias de habla que se sitúan entre dos secuencias, marcadores de un cambio de tópico, que actúan como un “salto brusco”, pues no suelen ir acompañados de ningún otro procedimiento para facilitar la transición. Son silencios que propician el cierre de una secuencia y el cambio de tema.
- Silencios por petición de atención o apoyo. Son silencios que se marcan de forma puntual, para conservar la atención del interlocutor y conseguir su acuerdo.
Otras circunstancias por las que se pueden producir silencios en las conversaciones son:
- Cuando se está hablando de un aspecto interesante o curioso y se dedica un tiempo, bien para pensar en lo que nos han dicho o bien el emisor para exponerlo de forma adecuada. Es característico de estos casos que las personas muevan los ojos, o que emitan sonidos como “hmm…, ya…, claro…”.
- Cuando la otra persona no quiere continuar la conversación. Lo normal es que la persona que está deseando finalizar la conversación genere señales no verbales que nos dan a entender su posición.
En este caso lo mejor es despedirnos cortésmente (tenemos algo que hacer, no queremos robarle más tiempo, en otra ocasión ya acabaremos la conversación…).
- Cuando pensamos que estamos aburriendo a la otra persona.
La persona con la que estamos hablando puede tener una forma de ser retraída, puede estar hablando con un superior y se cohíbe, puede ser un cliente que está valorando diferentes ofertas y prefiere que le contemos nosotros todo antes de preguntar nada, puede ser… Lo mejor es no suponer nada. Si vemos que la otra persona guarda silencio podemos hacerle preguntas abiertas del tipo: ¿Tiene algo que decir respecto a la propuesta?, ¿Qué le ha parecido la idea de…?, ¿Conocía ya la información respecto a…?, ¿Ha entendido lo que le quiero decir con…?
Pero puede suceder que la persona realmente tenga falta de interés por lo que le estamos contando. En este caso lo mejor es cambiar de tema o intentar reconducirlo por otra vía: “Veo que no tiene interés en el proyecto sobre… Sin embargo, recientes estudios le dan una probabilidad del 78% de resultar exitoso”, “si prefiere que tratemos el otro asunto pendiente”.
- Cuando se dice algo “fuera de lugar” y la otra persona se queda sin reaccionar.
- Cuando no se mantienen las “reglas” de distancias físicas. La proxémica en las conversaciones.
Aparte de los silencios conversacionales, se producen, en base a su “comodidad”, otros dos tipos
El silencio cómodo
Este silencio se denomina cómodo porque todos los miembros que participan en él se sienten cómodos en la situación. Sucede, por ejemplo, cuando tras visionar un proyecto los asistentes prefieren tomar sus apuntes a empezar una conversación.
El silencio incómodo
Es el que se produce cuando alguno o todos los participantes en la conversación no se siente cómodos en esa situación. Volviendo al ejemplo anterior, se produce una vez que todos han terminado de apuntar sus notas y no hay nadie que inicie el diálogo, que pregunte que nos ha parecido.