Time Blocking: gestiona tu tiempo como un CEO, o, al menos, como alguien que no vive apagando fuegos

Hace unos años, empecé a trabajar con una startup tecnológica en fase de crecimiento. El CEO, Laura, era brillante, carismática… y completamente desbordada.

jueves, 9 de octubre de 2025
Tags:
 
Cada día era un caos:
 
  • Llamadas que interrumpían reuniones.
  • Reuniones que interrumpían el trabajo.
  • Trabajo que interrumpía su vida personal.
  • Vida personal que… bueno, casi no existía.
 
Un lunes por la mañana, después de ver cómo respondía un correo mientras hablaba por teléfono y escribía en una pizarra (sí, todo a la vez), le dije algo que no olvidó: “Laura, tu problema no es de tiempo. Es de arquitectura.”. Ella sonrió, dudando si era una crítica o un cumplido.
Le hablé de algo que cambió mi forma de trabajar hace años: Time Blocking.
 

¿Qué es el Time Blocking?

 
El Time Blocking es una técnica de gestión del tiempo que consiste en asignar bloques específicos del calendario a tareas concretas, en lugar de dejar que las tareas se filtren aleatoriamente a lo largo del día.
“No haces lo urgente cuando te lo pide el mundo. Haces lo importante cuando lo has planeado tú.”
 
La primera semana de Laura
 
Le propuse un experimento: una semana entera usando Time Blocking.
Creamos juntos su calendario:
 
  • 08:00–08:30 → Revisión estratégica
  • 09:00–11:00 → Deep Work: tareas creativas o decisivas
  • 11:00–11:30 → Revisión de correos
  • 11:30–13:00 → Reuniones
  • 14:00–14:30 → Almuerzo real, no frente al portátil
  • 15:00–16:00 → Gestión de equipo
  • 16:00–17:00 → “Bloque libre” para imprevistos
  • 17:00–17:30 → Aprendizaje / Lectura / Formación
 
Lo que pasó después
 
El primer día le costó. El segundo también. Pero el viernes… me llamó entusiasmada. “¡He terminado todo antes de las 6! Y encima tengo la cabeza clara. ¿Qué brujería es esta?”
No era brujería. Era proteger su atención.
De hecho, descubrimos que Laura no necesitaba más horas. Solo necesitaba recuperar el control de para qué eran sus horas.

 
¿Por qué falla la mayoría?

 
Porque vivimos con el calendario de otro.
Nos pasamos el día respondiendo peticiones, interrupciones, urgencias que no eran nuestras.
Y así dejamos sin tiempo lo que de verdad mueve el negocio (y nuestra vida): pensar, crear, liderar, aprender, vivir.
 
Cómo empezar tú con el Time Blocking
 
  1. Empieza por bloques pequeños: 2 horas de trabajo profundo sin interrupciones ya marcan la diferencia.
 
  1. Bloquea primero lo importante, no lo urgente: nadie agenda tiempo para pensar… y es lo que más falta hace.
 
  1. Respeta los bloques como respetarías una reunión con tu cliente más importante (porque tú eres ese cliente).
 
  1. Deja espacio para respirar: no conviertas tu agenda en una prisión. Deja márgenes.
 
  1. Evalúa cada semana: ¿Qué bloque funcionó? ¿Cuál fue imposible de cumplir? Ajusta. Aprende. Repite.
 

Gestiona tu día como si dirigieras una empresa

 
Laura sigue usando Time Blocking. Y su startup ha crecido. Pero más importante aún: ella también ha crecido. En liderazgo, en claridad, en tiempo de calidad.
Y tú no necesitas ser CEO para hacerlo. Solo necesitas decidir que tu tiempo vale tanto como el de uno.
 
Este tipo de herramientas también forman parte de los contenidos del Máster en Emprendimiento Digital de Spain Business School —porque emprender no es solo saber crear empresas, es saber gestionar tu recurso más valioso: el tiempo.
 

Posts Relacionados:

Utilizamos cookies propias y de terceros para mejorar nuestros servicios. Si continúa navegando está aceptando su uso. Puede retirar su aceptación cuando lo desee. Aceptar Política de Cookies