La usabilidad es la "facilidad de uso", o, dicho de otra forma, la sencillez y practicidad que tenemos las personas a la hora de utilizar objetos o herramientas útiles, como pueden ser las aplicaciones, las páginas webs, los teléfonos móviles, app, etc. con los que interactuamos habitualmente.
Facilitar el acceso a la tecnología trae consigo el nacimiento de nuevas profesiones en el mundo digital, como por ejemplo el UX (User eXperience), que es aquel profesional encargado de brindar las mejores experiencias a los usuarios a través de los productos o servicios de la compañía en la que trabaja.
Un breve recorrido por la experiencia que recibimos
Un usuario realiza una búsqueda, digamos que en Google, y entre todos los resultados que obtiene se decide por el que aparece en 4º lugar y no es un anuncio. Entra en la web por primera vez y se encuentra con un aspecto limpio, claro e intuitivo, por lo que decide seguir navegando. Si no se ha fijado antes, ahora sí que lo hará: mirará cuál es el nombre de esa empresa y esta primera impresión sí que vale.
Cualquier búsqueda que realicemos en un buscador nos arrojará miles de resultados, así que la competencia es feroz como para que nos la juguemos desde el primer momento.
Ventajas de la usabilidad
Tanto en el mundo offline como en el online, un sitio en el que te atiendan bien, que te reporte confianza, que te resulte agradable y seguro, se convertirá en un lugar en el que querrás volver. Así que uno de los principales beneficios que vamos a obtener con un sitio web usable es la fidelización de los usuarios, pero vamos a ver qué otras ventajas conseguiremos:
- Aumentar el tráfico hacia la web
- Conseguir que las visitas naveguen más tiempo y por más sitios en nuestro site, disminuyendo además en porcentaje de rebote.
- Lograr que los usuarios nos compartan y nos recomienden.
- Aumentar los ingresos a través de la página.
¿Cómo hacer que una web sea usable?
Hacer que una web sea usable es uno de los puntos principales que cualquier e-Commerce, de cualquier tamaño y sector, debe plantearse antes de salir a la luz.
Para ello debe de considerar varios puntos, como:
- No despistarnos. Los productos y servicios que tenemos es lo que el usuario está buscando, así que los mostraremos tal cual, sin florituras.
- La velocidad de carga. Una web que tarde mucho en descargarse tiene unas altas probabilidades de que no llegue a cargarse completamente porque el usuario desista y le dé a la flechita de volver para visitar a la competencia.
- Realizar clasificaciones lógicas con los contenidos. Todos los contenidos: textos, imágenes y otros recursos deben de separarse de la forma a la que los usuarios les resulte más fácil acceder. Los titulares deben de ser claros y corresponder con el texto o imagen al que se dirigen.La web deberá de tener un Menú visible para que los usuarios no se sientan perdidos y puedan acceder a la sección que desean.
- La tipografía también debe de ser tenida en cuenta. Un tipo de letra que no se entienda bien, excesivamente pequeña o con colores escandalosos o poco visibles van a provocar una huida rápida de la web.Existen muchas fuentes para usar y con muchas variantes, así que habrá que dedicar un poco de tiempo a elegir la adecuada. Una bastante clara es la Roboto, pero puedes consultar y ver muchas de las existentes en https://fonts.google.com/. El tamaño de la letra también es importante. Un cuerpo demasiado pequeño dificulta la lectura y requiere más concentración. Además, un tamaño pequeño dificulta la visualización en los dispositivos móviles. Cada fuente de letra tiene un tamaño diferente, así que no quedará más remedio que hacer pruebas y ver cómo se ve en cada tipo de dispositivo. Lo recomendable es un tamaño de entre 14 px y 18 px. Para una buena legibilidad y comprensión del texto es necesario también escoger un interlineado favorable a la lectura. Un texto con el interlineado muy junto se vuelve hostil antes de comenzar a leerlo.
- Adaptar la web a todo tipo de dispositivos. Porque ya no buscamos información solo desde el ordenador, sino que lo hacemos a través del teléfono móvil o de la Tablet y cada uno tiene un tamaño de pantalla diferente.
¿De dónde proviene el término usabilidad?
Usabilidad no es un término aceptado en la RAE, aunque podemos encontrar una definición en
Fundeu:
“Usabilidad, con el sentido de ‘cualidad de usable’ es un término apropiado, y su empleo, correcto. Es una palabra bien formada, adaptada al español a partir del inglés usability, y ya se registra en algún diccionario de uso, como el General de Vox: Cualidad de la página web o del programa informático que son sencillos de usar porque facilitan la lectura de los textos, descargan rápidamente la información y presentan funciones y menús sencillos, por lo que el usuario encuentra satisfechas sus consultas y cómodo su uso: test de usabilidad; pruebas de usabilidad.”
El Día Mundial de la Usabilidad #DiaMundialdelaUsabilidad
El día de la usabilidad nace en el año 2005 con el objeto de buscar el uso fácil y acceso a los productos y servicios que son importantes en la vida de las personas, siendo iniciativa de la Asociación de Profesionales de la Usabilidad.
Cada año se celebra este día, el segundo jueves de noviembre, dedicándoselo a un tema referido a la usabilidad, como, por ejemplo, “Sostenibilidad” (2009), “Educación: Diseñando para el Cambio Social” (2011) o “Inclusión” (2017). Este año el tema elegido será “Diseño para el futuro que queremos”, inspirado en los 17 objetivos de la Organización de Naciones Unidas sobre desarrollo sostenible.