Imagina que entras en tu tienda favorita. El aroma sutil de café recién hecho flota en el aire, las luces cálidas crean una atmósfera acogedora y, de fondo, suena una melodía suave que parece sincronizarse con tu estado de ánimo. Sin darte cuenta, sientes una conexión inmediata con el lugar y, antes de salir, compras algo que quizás no tenías pensado adquirir. ¿Coincidencia? No exactamente. Esto es neuromarketing en acción.