En el aula, cuando abordamos el análisis de mercado desde una perspectiva estratégica, es frecuente que hablemos de tendencias, oportunidades o segmentación. Pero pocos conceptos tienen tanta fuerza explicativa —y utilidad práctica— como las métricas TAM, SAM y SOM, fundamentales para cualquier plan de negocio, modelo financiero o decisión de inversión.