En Big Data existen tres perfiles: el arquitecto, el científico y el analista. Mientras que el primero está enfocado a un perfil de ingeniero informático, el segundo a informáticos, matemáticos y estadísticos, el tercero se dirige a otro tipo de perfiles, como por ejemplo a licenciados en ADE y para algunas carreras de letras, como pueden ser periodistas, filósofos, psicólogos....
Las empresas saben que necesitan tecnología y herramientas, es decir, perfiles técnicos; pero cada vez están más convencidas de que también necesitan perfiles analíticos y humanísticos, como el del analista.
Pero ¿por qué es tan importante tener un analista en la plantilla? no cabe duda que la migración de las empresas hacia lo digital camina a pasos agigantados y, uno de los cambios que la tecnología ha provocado en nuestras vidas, ha sido la capacidad de acción en la que nos encontramos. El espacio comercial en el que se mueven las empresas ha ensanchado hasta la globalidad. Ya está obsoleto el que un cliente te mande una queja por carta y tardemos un mes en darle contestación, incluso a que lo haga a través de un mail pensando que solo se conecta cuando está delante de un PC.
La realidad es que los usuarios llegan a las empresas por diferentes dispositivos y por distintos canales, a los que la gran mayoría estamos conectados 24h al día.
En cualquier sector es necesaria la figura de un analista, sin embargo, hay algunos campos en el que se hace imprescindible, como por ejemplo en el de la salud, en el de los seguros, en el de la política, en las finanzas, en el turismo, en el e-Commerce, en el del transporte, en el de las comunicaciones, e incluso diría que en el de la educación.
Los analistas son aquellos profesionales que, además de reunir, compilar, analizar e interpretar los datos, saben también formular las preguntas importantes.
Además de saber seleccionar la información significativa y descartar la que no aporta nada, son especialistas en realizar las preguntas que ofrecen información válida a las empresas. Es decir, formulan las preguntas en base a las respuestas que necesitan para la toma de decisiones, ya sea para realizar campañas de marketing, para realizar cambios que beneficien a la organización en otros aspectos, para evaluar ciertos riesgos...
En busca de 'sentimientos'
Sin embargo, no solo se trata de que el analista recoja la información "limpia" en un Excel y sepa sacar las gráficas. Es importante que los datos no se reduzcan solo a números, sino que en ellos también seamos capaces de sacar "sentimientos", buscar un ¿para qué estos datos? Encontrar y analizar la subjetividad en la que se producen esos datos y el fin que buscamos con ellos.
Antiguamente, las empresas recopilaban información de sus clientes bien a través de las encuestas -aquellas organizaciones que las realizaban, los clientes las contestaban y las devolvían rellenas al apartado postal indicado-, algunas veces se recogían a través de las llamadas telefónicas (en un sentido u en otro. Actualmente se registran en los CRM), o por la carta que el cliente enviaba realizando preguntas o quejas.
Actualmente permitimos que nuestros datos dejen rastro por los sitios en los que navegamos en Internet (OLAP) Procesamiento analítico en línea), en la mayoría de los casos sin el mínimo esfuerzo. El mundo genera diariamente más de 2.5 millones de gigabytes de datos, que ayudan, entre otros, a las empresas a tomar decisiones que, por ejemplo en marketing, si no eres experto, parecen nimias, pero que no lo son, como puede ser cuál es el mejor horario para enviar un email marketing a cierto sector de su clientela; o para saber en qué parte de la web se clica más para colocar un banner (anuncio); o cuál es la mejor red social, día y hora para publicar una oferta; etc. Pero, además de mejorar la experiencia de usuario, y por lo tanto la lealtad de los clientes, también ayuda a descubrir qué demandan los clientes en su empresa y no encuentran, a establecer patrones de conducta, incluso a evitar los fraudes.
Diversos estudios muestran que las compañías encuentran dificultades a la hora de encontrar perfiles capacitados en el sector digital.